Paraísos cercanos – La Pedriza

«Por mucho que recorramos el mundo detrás de la belleza, nunca la encontraremos si no la llevamos dentro» Emerson

Desde el año 1996 comencé a escribir  sobre las ascensiones alpinas que iba realizando,  lo anotaba todo en unos cuadernos.  Describía las rutas y también escribía sobre esas emociones que me generaban y de las que también hablo en el blog.

Hace un momento, mientras buscaba algo que me pudiera servir para comenzar esta entrada, me he encontrado la frase de Emerson anotada al comienzo del segundo de esos cuadernos. Debajo había anotado también estás palabras, que creo que merecen estar aquí:

Hubo un momento en el que ese impulso que movió a las personas a subir montañas, a llegar a lugares lejanos e inaccesibles…, debió de ser parecido al que sintieron algunos artistas a la hora de crear sus obras, un impulso que nace de la contemplación pura de lo hermoso, lo grandioso o simplemente aquello que es capaz de despertar un sentimiento en nosotros. Hoy es la vanidad la que mueve a muchos para realizar esas empresas, y por eso nunca podrán llegar ni demasiado lejos, ni suficiente arriba.

Josean (27/01/1999)